Der Himmel über Berlin

Dejé que me acariciase el pelo, sonrojada más que antes, aunque sorprendentemente cómoda en aquella actitud.

-Es extraño eso...¿no?-Pregunté un tanto indecisa, pensando que yo podía protegerle, más que él a mi y que él...posiblemente estuviese en peligro a mi lado...

- Un poquito. - Sonrío de nuevo, nervioso. No me apetecía nada apartarme, aunque no sabía como se lo estuviera tomando ella. Aun así, no me moví. - Y dime, Lil, ¿que edad tienes? - Tal vez necesitara algo de documentación falsa para salir del pais.

Me reí suavemente sin separarme de él, aunque sonrojada y un poco nerviosa, igual el no quería estar abrazándome.

-Tengo...dieciseis.-Dudé, sí, los tenía, aunque no cumpliría más años, al menos me físico no cambiaría, nunca más. Esa perspectiva me puso muy nerviosa, lo que provocó que le abrazara más fuerte inconscientemente.

Noto que me abraza más fuerte, y la miro, preocupado. Seguramente habría tocado alguna fibra sensible. Como siempre. Empecé a quedarme sin aire.
- Lil, me estrujas. -Comenté con una risita.

-Ohh...-Le dije separándome sonriendo azorada.-Lo siento, Lucas.-Me disculpé sin saber que decir.

- No hay problema. - Volví a sonreir. - Hay que ver la fuerza que tienes. - Comento y sigo caminando.

Sacudí la cabeza y me encogí de hombros, fingiendo indiferencia.-Ya...no sé de donde la abré sacado.-Sonreí, sintiéndome totalmente culpable, por mentirle de aquella manera.

Medio sonreí, aunque sospechaba un poco. Aquella chica no era muy normal que se dijera, poco a poco, nos fuimos alejando de la multitud y empezó a haber edificios mas pequeños.

Caminé la mayor parte del tiempo a su lado o un poco detrás de él; con la mirada un poco perdida. Poco a poco fuimos dejando la zona céntrica, para pasar a barrios, más modestos.
No sabía que decir, así que me mantuve callada casi todo el trayecto, jugueteando con mi pelo.

- ¿Y porqué quieres irte? - Le pregunto al cao de un rato. En teoría no era de mi incumebia, pero el silencio no era mi fuerte.

-Porque no soporto C.A.O.S, ni a mi familia.-Expliqué, ya que era cierto, lo de que me había transformado en vampiro, era algo secundario, sin planear, que ya había ocurrido después de escaparme.-¿Y tú, qué haces en Alemania?-Pregunté curiosa.

- Oh... - Murmuro. Sí que era un poquito mucho bocazas. - Yo trabajaba. Aunque ya acabé mi trabajo y ahora estaba descansando cuando te encntré.

-Aha...-No quise preguntar en que trabajaba, no era mi de mi incumbencia, aunque tenía curiosidad.-Mmmm y por cierto, no te preocupes, por preguntarme por mi huida, me da un poco igual.-Mentía, pero no quería aceptar la realidad, que era que me sentía muy sola.

- No, no es de mi incumbencia, y no quiero hacerte daño al pensar en eso. - Le guiño un ojo mientras seguía caminando.

-No te preocupes.-Dije sonriendo, restándole importancia haciendo un gesto con la mano.-Pero me siento bastante sola...-Reí.-¡Qué ridículo, sentirse sola...!-Comenté.

Me paro y me giro para mirarla, serio.
- No es nada ridículo sentirse solo. Nunca dejes en un plano secundario a tus emociones diciendo que son tontas sólo por miedo a o que digan de ti. Eso sí es ridículo. - Le hablo con l voz de la experiencia.

Le escucho atenta, reflexionando unos minutos antes de responder.-Ya... pero pensé que... si me atrevía ha abandonar a mi familia, sería capaz de afrontar la soledad, dignamente al menos.... Pero me he dado cuenta, de que odio estar tan sola.-Respondí en voz baja, agachando la mirada.

- Bueno... si dos margis se juntan, ya no son margis. - Respondo guiñándole un ojo de nuevo.

Sonrío sonrojándome levemente.-Cierto.-Guiñándole yo un ojo correspondiendo a su guiño.

Río quedamente y me paro al ver un motel que parecía baratito. Dado que ya era madrugada, pensé que sería una buena idea descansar aquí. Miré a Lil.
- ¿Te parece descansar aquí hasta la mañana?

Observo el motel y me encojo de hombros, para después sonreir.-Claro, me parece buena idea.-Le dije sonriendo.
Comencé a caminar, hacia el motel, decidida.

La sigo y entro en el edificio. Pido a la dependienta una habitación y se la pago. Tampoco esque llevara mucho dinero encima. Me dan la llave y subo por las escaleras hasta el primer piso, me encamino por el pasillo hasta llegar a la habitación indicada.
- Aquí. - Le digo a Lil y entro.

-Debería haber pagado yo, suficiente estás haciendo por mi.-Le dije, siguiéndole por el pequeño motel, hasta llegar a la habitación, observándola; después de un silencio comento.-Una cama...-Después solté una carcajada.

- Sí. - Me uní a sus risa, azorado. - Pues nada, yo duermo en el suelo y tu en la cama.

-No-no, qué dices, como vas a dormir en el suelo, Lucas...-Le dije, poniendo mi mano en su hombro.-La cama es bastante grande, y mmm, no me quitaré la ropa ni nada.-Dije sonriendo un poco azorada.